SINOPSIS:

A pesar de haber sido criada para ser la perfecta lady victoriana de clase alta, Audrey Rose Wadsworth tiene un plan distinto para sí misma. Después de la pérdida de su querida madre, Audrey está decidida a comprender la naturaleza y el funcionamiento de la muerte. por eso, cambia la aguja de bordar por un bisturí de autopsias y, en secreto, aprende la ciencia forense. Y es así cómo se ve involucrada en la investigación del asesino Jack el Destripador, pero para su horror, las pistas la conducen mucho más cerca de su mundo protegido de lo que podría haber imaginado.

RESEÑA:

Empecé a leer este libro con un poco de reticencia porque el terror no es lo mío y si hablamos de Jack el destripador (de aquí en adelante JED), qué podía esperar? El primer capítulo arrancó demasiado gráfico para mi gusto y temí que todo el libro fuera de esta manera, así que decidí darle chance a que esto no fuera así y para mi agrado tuve a cambio una lectura muy ágil de leer, con momentos de romanticismo, suspenso y drama como no, pero con la necesidad de seguir leyendo para ver que iba a pasar a continuación. Es cierto que hay elementos muy gráficos en algunas descripciones pero se pasa rápido y a veces es necesario para entender algunas cosas.

Esta novela es la primera parte de una saga y trata sobre Audrey Rose Wadsworth, una chica de alta sociedad del siglo XIX que le gusta el campo de la medicina forense algo que vuelve loco a su padre y al resto de la familia porque no estaba bien visto en aquella época. Se supone que una señorita se su clase social debería aprender a coser y a bordar y asistir a eventos sociales como una tarde de té como las que su tía suele realizar pero en cambio prefería escaparse para hacer autopsias con su tío.

Así que Audrey Rose se vuelve aprendiz de su tío junto a Thomas Cronwell, un joven un poco egocéntrico y arrogante pero que aun así, es un personaje sumamente divertido y que hace perder un poco los cabales de Audrey Rose. Sin dudas que estos dos personajes le dan el aire fresco y divertido en la medida justa que la novela necesita para cortar un poco con el drama en sí.

Ellos tres empiezan a investigar los asesinatos de JED realizando las autopsias de las mujeres muertas a manos de este sangriento asesino intentando obtener pistas para develar la identidad de él. Sin duda que Audrey Rose era una joven rebelde y muy decidida así que no le basta con estar solamente en el laboratorio del tío para resolver estos crímenes, sino que también decide camuflarse en las calles para obtener datos y dar con el asesino serial.

Esto la lleva a atravesar situaciones peligrosas y misteriosas que le harán conocer cosas de su niñez relativas a la temprana muerte de su madre entre otras cosas.

Debo decir que deducir quién es el asesino siempre me lleva tiempo. Sospecho de todos y de ninguno. Así que saber quién era JED estaba claro que me iba a tomar mi tiempo. Cuando mis sospechas se confirmaron quedé impresionada!

Este libro me gustó muchísimo más de lo que esperaba, tiene todo en su justa medida sin pasarse de nada. Intriga, misterio, romance, drama y sangre (obviamente) Si bien la historia de JED empieza y termina en esta primera parte, no puedo esperar a leer el segundo libro de esta saga "A la caza del Príncipe Drácula" con Audrey y otros personajes en otro país. (Si leen el libro verán por qué)

Valoración: